La hija de Daniel Filmus denunció por abuso a un ex médico de la escuela ORT

(CABA) El médico pediatra Alberto Cirulnik, que trabajó en las escuelas de la comunidad judía ORT y Tarbut, fue denunciado por abuso sexual y corrupción de menores por dos varones y una mujer. Entre las víctimas está la hija de Daniel Filmus, Malena, que fue alumna de ORT. “El objetivo es que se sepa para que este tipo no abuse de nadie más. Hay otros casos de jóvenes que no se animan a denunciar”, dijeron a Clarín allegados a las víctimas.

En el caso de Leandro Koch y Malena Filmus, los abusos denunciados tuvieron lugar en el consultorio médico de la escuela ORT. Ocurrieron cuando Leandro tenía 13 años y asistía a la sede de Yatay, y a los 14 de Malena, en la sede Montañeses del mismo colegio.

Darío Schvartz también era estudiante de ORT aunque denunció que padeció los abusos fuera de la institución ya que Cirulnik era amigo de la familia y su pediatra. En su caso, fue víctima del médico desde los ocho y durante años.

La denuncia se formalizó el viernes. En el expediente, Schvartz relata que Cirulnik era el mejor amigo de sus papás y que, por esto, muchas veces iba a la casa del hombre y que, además, ambas familias compartían un bungalow del tamaño de un monoambiente en el Club Kadima.

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“A partir de mis ocho años, Alberto me llevaba a acostar para dormir a la noche. Él me hacía masajes para que me relajara y dentro de esos masajes, me manoseaba. Y me pedía que también se los hiciera a él”, detalla. Dario sufría los abusos mientras los otros adultos “estaban en el bar del club jugando al burako” y sus hermanos, en fútbol.

“Me atendió durante toda mi infancia. En las consultas manipulaba mi cuerpo para que con mi mano le toque el pene”, sigue Schvartz, ahora de 34 años. “Los masajes y tocamientos se repitieron muchas veces, tanto en su casa y en el consultorio como en el club”.

Relata que a los 12 o 13 años, cuando empezó a tomar contacto con su propia sexualidad, comenzó a entender lo que este adulto le estaba haciendo pero que recién pudo contarlo a los 20 años, primero en terapia. En 2010, lo compartió con su novia y con sus padres.

Fue en ese momento que los padres de Darío rompieron todo vínculo con Cirulnik y empezaron a alertar a sus conocidos sobre lo que hacía este médico. A fines de 2011, por los “rumores” que venían circulando, a Cirulnik lo despidieron de ORT. Por esto, el agresor denunció a los Schvartz por “injurias”, causa que no llegó a juicio.

Buscando “otras víctimas”, Darío se encontró con Leandro Koch. El joven contó que también había sufrido abusos a sus 13 años dentro de la escuela ORT. Fue en una visita al médico por un dolor de cabeza. Según se desprende del expediente, Cirulnik le hizo sacarse la remera y, mientras lo revisaba, llevó la mano del chico a su pene en dos oportunidades. Lo tuvo dentro del consultorio alrededor de una hora y media, le hizo preguntas de índole sexual, vinculadas a la masturbación y a si sentía deseo por otros hombres, y terminó haciéndole propuestas sexuales, según el detalle de la denuncia.

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Este año, se sumó el caso de Malena. “Por un tercero, Malena se enteró de lo que le pasó a Leandro. Fue entonces que pudo darse cuenta de que ella también había sido víctima. Ahí se contactó con las otras familias y decidieron formalizar en conjunto la denuncia”, agregaron allegados a las víctimas a este diario.

La hija de Filmus cuenta, a través del documento judicial, el episodio del que fue víctima a los 14 años: “Estaba cursando en el colegio y un día dije que me dolía la cabeza y fui al consultorio. Cirulnik me pesó, me dijo que estaba muy flaca para su gusto, tocándome todo el cuerpo”.

En su testimonio también da cuenta de otros abusos. “Me acuerdo que en ese momento pensé: ‘qué raro que esté haciendo eso, no puede ser nada raro porque es médico de ORT’”, agrega Malena en su declaración.

Guillermo Feldberg, presidente de ORT, se manifestó a través de un comunicado. “En virtud de las denuncias que están circulando, que involucran a un profesional que trabajó en nuestra institución hasta diciembre del año 2011, desde ORT Argentina queremos informar que repudiamos todo tipo de maltrato o abuso tanto dentro como fuera de la escuela”, dice el texto. Además, agregan: “Nos ponemos a disposición para aportar cualquier información que contribuya a la investigación de la denuncia formulada por ex alumnos, sin importar cuál haya sido la oportunidad o el lugar en que los hechos relatados acontecieron”. Desde Tarbut se limitaron a decir que Cirulnik “no trabaja en la institución desde hace años”. NR