Buenos Aires, 29/09/2023, edición Nº 3971
Connect with us

Información General

Siete partes del cuerpo que no tienen ningún tipo de utilidad

Existen rasgos que a nivel evolutivo ya no necesitamos para nada. Conocé siete de ellos.

Published

on

[sociallocker id=128997](CABA) “Existen rasgos que a nivel evolutivo ya no necesitamos”, explicóel doctor Andrew Rochford quien enumeró siete partes del cuerpo que ya no tienen ningún tipo de utilidad para nuestra supervivencia o la salud.

1. Los pezones masculinos
Más allá del lado erótico que pueda otorgárseles, los pezones en los hombres son innecesarios. Entonces, ¿por qué contamos con ellos? Se debe a la forma en la que los fetos se desarrollan en el útero: los pezones aparecen porque en principio todos somos “mujeres”. Con el tiempo, los hombres reciben el cromosoma Y, que es el que define el sexo masculino en los humanos. Luego se forman los órganos sexuales: vagina y ovarios, por los cromosomas XX (femenino); y testículos y penes, por los cromosomas XY (masculino). “Los pezones son un rasgo evolutivo que los hombres ya no necesitamos. No tienen ningún propósito real”, contó el Dr. Rochford.

2. El apéndice
Al pequeño órgano en forma de tubo que está unido al intestino grueso y se encuentra en la parte inferior derecha del abdomen, no lo necesitamos para nada. “Hubo una época en la que el apéndice ayudaba a digerir ciertos materiales vegetales que consumían los seres humanos, sustancias que nunca hemos vuelto a comer”, declaró Rochford.

En general, los humanos sólo notamos este órgano cuando se inflama (apendicitis), provocando fuertes dolores, y hay que extraerlo. Si eso no sucede, no pasa nada, ya que no tiene ninguna función en el cuerpo.

Advertisement

El apéndice

3. Los músculos que mueven las orejas
A menos que haya gente que nos pague para mover las orejas, éstos músculos no sirven para nada. Rochford explica que en nuestra evolución poder mover las orejas tuvo su utilidad, mantenernos alertas de nuestros depredadores. “Los animales los siguen usando. Captan mejor los sonidos ambientales, cazan o agarran por sorpresa a un depredador que los acecha”, agregó.

4. Las amígdalas
“Podemos vivir sin ellas. No son más que una parte del sistema inmunológico que no necesitamos”, sentenció el doctor. Pese a que hace unas cuantas décadas que ha dejado de hacerse, son varios los estudios que defienden su extracción a edades tempranas para evitar problemas de salud. El hecho es que estas extensiones de tejido linfoide situadas en la laringe son útiles para proteger la entrada de las vías respiratorias de la invasión bacteriana, pero sólo cuando somos pequeños, concretamente hasta que cumplimos los tres años. A partir de allí, las amígdalas podrían incluso convertirse en el peor enemigo de nuestra garganta y sistema inmune provocando infecciones peligrosas como la que porta su propio nombre, amigdalitis.

Las amígdalas

5. Las muelas del juicio
Geniales para roer y arrancar la dura piel de animales recién cazados, la realidad es que las muelas del juicio hoy no son necesarias para el tipo de alimentos que consumimos. Por lo general, acaban desarrollándose en algún momento de nuestras vidas pero casi nadie sale indemne de este surgimiento. Se calcula que solo el 5% de la población cuenta con un juego sano de estos terceros molares.

O lo que es lo mismo: el 95% de las personas no tiene espacio suficiente para que salgan por completo las cuatro muelas del juicio lo que se traduce en dolor e incluso en una desestructuración de su sonrisa ya que, para hacer hueco a las nuevas el resto de los dientes terminan por moverse hacia delante o atrás o superponerse sin un orden lógico. De ahí que muchos dentistas opten por extraerlas en el mismo momento en el que empiezan a asomarse.

Advertisement

6. Los lóbulos de las orejas
“¿Para qué pueden servirnos aparte de para ponernos aros?”, se preguntó el doctor. No, no sirven para nada. Es un rasgo evolutivo que de a poco va desapareciendo. Sin embargo, según BBC Focus, los lóbulos de las orejas tienen un buen suministro de sangre y pueden ayudar a mantener la oreja a una temperatura cálida. Pero podría ser, simplemente, que la selección natural todavía no los haya eliminado. También hay evidencia que apunta a que los seres humanos los encontramos atractivos.

7. El cóccix
Este hueso que se encuentra en la base de nuestra columna vertebral es, en realidad, la fusión de cuatro pequeñas vértebras y parece no tener ninguna utilidad hoy en día. Sin embargo, en un pasado remoto debía formar parte de la cola de nuestros antepasados, desaparecida con la evolución.

Hace miles de años los humanos teníamos una especie de cola que nos ayudaba a mantener el equilibrio. Pero de aquella cola sólo nos queda el cóccix, la última vertebra de la espina dorsal que no, no sirve para nada. NR

lóbulos de las orejas

[/sociallocker]

Advertisement
Advertisement

Más leídas

Propietario y Editor Responsable: Juan Braña
Director Periodístico: Roberto D´Anna
Domicilio Legal: Pedernera 772
CP: 1407
Ciudad de Buenos Aires
Teléfono de contacto: 153 600 6906
Registro DNDA Nº: RE-2020-52309475-APN-DNDA#MJ


contador de visitas gratis