Todos miran a Larreta para que lidere el postmacrismo

(CABA) Mientras Mauricio Macri se abraza al “Sí se puede“, un grupo de dirigientes de Cambiemos comenzó a delinear el postmacrismo, una supervivencia del espacio sin el Presidente, a quien todos ven dejando el cargo y el liderazgo del Pro.

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El primer paso lo dieron el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó. Larreta tiene el mérito de haber sido el único dirigente relevante del PRO que sacó más votos que la oposición en las PASO. Y Monzó, fue el más desdeñado del ala política del Gobierno. Lo que fue un problema se transforma en virtud.

Si bien no hubo encuentro formal para “pensar el futuro”, en ese grupo cuentan con los candidatos y futuros legisladores Martin Lousteau, Alfredo Cornejo, Cristian Ritondo, Juan Manuel Urtubey y también con María Eugenia Vidal, con quien Monzó no tuvo buena relación en estos años pero no la imagina jubilándose.

A las diferencias obvias de extracciones radical y peronista le contraponen dos caracteristicas aglutinantes. Una es generacional y otra, en la que hacen más énfasis, la moderación.

De hecho, en las conversaciones informales y en las charlas más rigurosas como la de Larreta y Monzó, ya hablan del grupo de los “moderados”.

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Lo de Monzó es un hecho. El 10 de diciembre se va de la Cámara y ya piensa – según BAE Negocios – en liderar un minibloque de legisladores propio con Sebastián García De Luca y Silvia Lospennato como las figuras más visibles.

Lo de Larreta – a quien todos miran para que lidere el espacio – necesita aún el paso de las elecciones de octubre, para las cuales crece la ponderación hacia el postulante del Frente de Todos, Matías Lammens. Por eso, Larreta hace lo posible por esquivar a Macri y, Lammens, por pegarse a Alberto Fernández. NR