¿Cuánto sabés de la dieta ceto furor?

La siguen famosos y personas comunes, se la conoce por ser la que menos carbohidratos permite, la que más eleva el rendimiento y está de moda. Hoy hablamos de la dieta cetogénica, que ayuda a quemar grasas, revertir diabetes y verse mejor de forma rápida y eficaz, prometiendo no tener hambre porque deja comer casi todo alimento graso y elevando las endorfinas.

Parece nueva pero no lo es, data de más de 100 años atrás, solo que ahora es más conocida. Se valida con evidencia clara que permite dar fe de su eficiencia en la pérdida de kilos rápida, pero siempre bajo supervisión de especialistas en nutrición y medicina alternativa, porque de lo contrario no es posible seguirla en el tiempo y a la vez alimentarse correctamente. Más que un plan de adelgazamiento, se la percibe como un estilo de vida.

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Su significado
En particular, se trata de un plan que se basa en la alimentación natural, sin casi incluir harinas ni azúcares, pero sí siendo altas en cantidades de grasas y proteínas que sacian, pero no suman kilos.

¿Y así se adelgaza? Sí, precisamente, produce energía mediante la grasa, algo que se denomina cetona, y de ahí deriva su nombre. Se trata de un proceso químico que hace el cuerpo humano permitiéndole producir mínimas moléculas, siendo una fuente alternativa.

Cómo actúa
Aunque lo parezca, el azúcar de los carbohidratos más comunes como el pan blanco, los fideos, las papas y otros, no son la única fuente de la que el organismo se puede servir para tomar energía, también puede hacerlo de la grasa. Así, el organismo se ve obligado a usar la que deriva de la carne, los pescados, huevos, quesos, frutos y más permitidos. Es justo allí cuando se acaba el azúcar, que el hígado convierte esa grasa en moléculas de energía, es decir, cetonas.

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Los alimentos ideales:
huevos, manteca animal, cremas enteras, quesos enteros, frutos secos, aceites de oliva y coco, verduras verdes, carnes especialmente de cerdo y pollo, salchichas, jamón y pescado, pudiendo comer la cantidad deseada y todas las veces que se desee en el día.

Ventajas
– El cuerpo se vuelve una máquina quemadora de grasa
– No se tiene hambre ni tentaciones entre comidas, se siente el estómago lleno y a la vez liviano
– Aun durmiendo se reduce la grasa corporal
– Se come mucho más saludable y fresco a pesar de sumar grasas
– La energía es muy alta y se nota al hacer actividades, incluso a nivel cerebral
– Se equilibra la glucosa en sangre y con ello baja la ansiedad por los dulces
– El cuerpo se equilibra sin siquiera necesitar horas de gym
– Previene tumoraciones y molestias estomacales derivadas del exceso de harinas
– Ayuda contra el parkinson y el Alzheimer. Disminuye el acné, la piel se ve más luminosa