El modelaje tiene fecha de vencimiento

La modelo, diosa de Multitatent, en una charla íntima

Se asomó a los medios tímidamente cuando era apenas una adolescente de 16 años y cursaba el colegio secundario. El destino quiso que María del Cerro (28) acompañara a una amiga al casting de Super M, el reality que buscaba rostros nuevos para el mundo del modelaje. El jurado la terminó eligiendo y así, sin quererlo, la joven comenzó una carrera en los medios sin pausa, pero sin prisa.

“Cuando el modelaje no dé para más, o no me sienta más cómoda, incursionaré en otros proyectos. Me aburre hacer una sola cosa, siempre estoy buscando algo distinto”.

Luego vinieron las campañas publicitarias, los desfiles y los viajes, pero también nuevas oportunidades. La televisión le abrió la puerta y de a poco comenzó a dar sus primeros pasos en la televisión. Así llegaron papeles en Lalola, Casi Angeles, Los Unicos,Lobo, Dulce amor y Taxxi, entre otros. Hoy, la modelo de Multitalent se afianza arriba de las tablas en Algunas mujeres a las que les cag… la vida, la tercera obra en la que participa, junto a María Fernanda Callejón, Miriam Lanzoni y Laura Bruni.

En pareja desde hace casi cuatro años con el DjMeme Bouquet, Mery (como la llaman sus amigos) disfruta plenamente de su flamante convivencia y confiesa, en una charla íntima con Ciudad.com, que el paso del tiempo no es algo que la acompleje.

– ¿Cómo estás viviendo la experiencia en el teatro?

– Estoy muy contenta desde el primer momento que me llamaron. Teniendo sólo 15 días para ensayar, era toda una responsabilidad y por suerte todo fluyó mágicamente. Tenía un miedo tremendo porque decía ‘como hago para aprenderme todo’. Y estrenamos en San Luis y fue buenísimo. El grupo que se formó me encanta y está espectacular, lo estoy disfrutando un montón.

“Se hace difícil congeniar la modelo con la actriz, pero son elecciones y mi prioridad era abocarme más a la actuación. Uno pierde por un lado, pero también gana por otro”.

– ¿Te dio miedo tener tan poco tiempo?

– La realidad es que nunca había hecho algo así, no tenía ni idea si iba a llegar con tan pocos días. Encima era fines de diciembre, fue todo bastante de golpe. Tener un buen director como Marcelo Cosentino me ayudó mucho a lograrlo, tenía un montón de tips para darme y fue bastante fácil.

– ¿La respuesta inmediata del teatro genera adrenalina?

– Es alucinante, primero porque cada día que tenemos función pasan cosas diferentes. La gente es distinta y la energía cambia, la devolución del público y lo que uno siente, es una experiencia nueva cada vez. No es que uno se cansa y dice ‘todas las funciones son iguales’. Cada una tiene algo diferente y eso es lo mágico del teatro.

– ¿Y cómo es la dinámica con tus compañeras? ¿Se conocían?

– La verdad es que no, las conocía de vista pero no tenía relación. Pobre Marcelo, somos cuatro mujeres intensas cada una con lo suyo, así que nos tiene que soportar. Nos llevamos bárbaro, comparto camarín con Miriam y ella es súper divertida, la pasamos muy bien. Hace poco fuimos a la despedida de soltera de Fer. Es una divina total, entró en un momento muy particular de su vida, con todos los preparativos.

“Cumplo cuatro años de novia en mayo y hace tres semanas nos fuimos a vivir juntos. Es una experiencia nueva y me daba un poco de miedo”.

– ¿Se te hace difícil congeniar la modelo con la actriz?

– La verdad que un poco sí porque muchos trabajos de modelo los hacía los fines de semana. O tenía eventos en el horario que ahora estoy en función, pero también son elecciones y para mí este año la prioridad era abocarme más a la actuación y a esta obra. Uno pierde por un lado, pero también ganás por otro. Es una apuesta, trato de no pensar en lo que no puedo hacer. Los que no se dan, no se dan.

– ¿Te gustaría enfocarte más en la faceta artística?

– Creo que todo lo que es actoral no tiene tanta fecha de vencimiento como si lo tiene el modelaje. Al ser mujer, ¡la ley de gravedad influye! Por el momento, puedo hacer las dos cosas y cuando no dé para más, o no me sienta más cómoda, incursionaré en otros proyectos. Me aburre hacer una sola cosa, siempre estoy buscando algo distinto y me interesa mucho el diseño de indumentaria. Este año también empecé con una línea llamada by Mery del Cerro para Sweet Victorian y ya estoy diseñando para 2015. Estoy muy copada con eso.

– ¿Lo vivís como algo difícil el paso del tiempo?

– No, no, la verdad que me parece que lo más importante es disfrutar cada etapa. Uno no puede estar pensando todo el tiempo en que cumplís años y en que crecés. Son diferentes momentos y cada etapa tiene su parte linda. Trato de disfrutarlo y me parece que es la mejor manera, si uno se acompleja con eso y vive pensando en el paso del tiempo, se te pasa la vida y no terminás disfrutando de nada.

– ¿Y en el plano personal cómo estás?

– Muy bien, estoy de novia hace mucho tiempo. Ahora en mayo cumplo cuatro años con Meme. Hace tres semanas nos fuimos a vivir juntos. Él se mudo a mi casa, coincidimos en eso y estamos muy copados. Tratando de adecuarnos en el día a día a lo que tiene cada uno. Es la primera vez que convivo con un novio, es una experiencia nueva. Tenemos tiempos súper raros porque yo vuelvo del teatro tarde y él entrena rugby y es disc jockey, y llega a casa a las 8.30 de la mañana. Eso era algo que nos daba un poco de miedo. Pero la estamos llevando muy bien, creo que hablando las cosas fluyen. Cada uno tiene sus tiempos, sus espacios, sus amigos y lo respetamos.

– No me quiero imaginar cómo perdió en la distribución del placard.

– Un poco sí, ¡ja, ja, ja! Tengo un placard bastante importante, pero bueno, se adaptó.

Fuente: Ciudad.com