¿Cómo se adaptará el Real State y mercado inmobiliario luego de la cuarentena?

El mundo está siendo testigo de un cambio masivo en cuanto al uso de las tecnologías que abarca la gran mayoría de los sectores productivos, no solo la salud. La “nueva normalidad”, como han llamado a la reintegración de la vida cotidiana tras el parón que produjo la presencia del COVID-19 ha sido un proceso gradual que en muchos países ha promovido un cambio drástico para las actividades financieras e inmobiliarias.

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Muchos están detenidos y se mantendrán así por un largo tiempo. Otros están teniendo problemas de sostenibilidad y solo algunos pocos, en general los líderes, se mantuvieron e incluso proyectan un crecimiento exponencial que les hace destacar de la competencia en el mercado bursátil.

¿Qué les diferencia? Lo que separa a la permanencia de la obsolescencia es la asimilación de los cambios en los paradigmas productivos, especialmente en lo que concierne al uso de estrategias y herramientas tecnológicas y el desarrollo de los ambientes digitales para empresas.

¿Tendremos cambios paradigmáticos?

En definitiva se pronostican muchos cambios. El real estate se mantiene a la espera de una renovación de las actividades, pero mientras tanto visualizan alternativas para aumentar la productividad y conseguir cumplir las medidas de control que terminan por afectar los procesos empresariales. El reto radica en asumir esta nueva normalidad con una capacidad total o parcialmente diferente, sostenida por tecnología de punta y especializada que sustituya los procesos manuales.

El trabajo a distancia, la supervisión remota o la programación de tareas son aspectos que deberán considerar las empresas de aquí en adelante si se busca una consolidación dentro del sector. Los servicios que estén acompañados de ambientes digitales conseguirán ventajas considerables para la captación de nuevos clientes, la presentación de proyectos y durante el proceso fidelización de una marca, en la que la interacción, el entendimiento y la retroalimentación informativa con el usuario se convierte en un tema vital para las empresas del sector inmobiliario.

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En ese sentido, las productoras audiovisuales renuevan su valor al poder ofrecer servicios con tecnología innovadoras:

+ La gestión remota de proyectos
+ Seguimiento audiovisual de obras con drones
+ Promoción de eventos, productos y servicios
+ Presentación de avances e informes
+ Comunicación interna y corporativa

¿Cómo podrán los clientes seguir sus inversiones inmobiliarias?

Una de las ventajas que los líderes del sector consiguieron tras el parón del COVID-19 fue el aprovechamiento de las tecnologías para lograr eficiencia y aumentar la productividad. El término utilizado para reunir estas acciones se llama proptech y no solo mejorar considerablemente los métodos, procesos y resultados, sino también la comunicación.

Con el uso de aplicaciones es posible gestionar obras desde el teléfono o la tableta, sin necesidad de estar presente se puede reclutar personal, elaborar informes, comunicar órdenes y realizar proyecciones de los resultados.

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Los drones también son una herramienta eficaz para transportar material, conseguir imágenes en alta definición de la obra de construcción y obtener información en general sobre el estado del terreno, materiales, empleados y más. De manera, que es el proptech un movimiento que está generando mucho interés por su capacidad de despliegue y respuesta.

Así tenemos una serie de aspectos positivos que los clientes pueden asumir cuando se trata de realizar seguimiento a sus proyectos:

+ Gestión 24/7
+ Capacidad remota
+ Presentaciones personalizadas
+ Estadísticas en tiempo real
+ Datos empresariales precisos y automatizados

Transición del trabajo en oficina al trabajo remoto

Al no poder asistir a los puestos de trabajo, muchos empleados detuvieron sus actividades, lo cual afectó tremendamente al sector inmobiliario. Sin embargo, para resolver estos inconvenientes se adaptaron estas labores, en la medida de lo posible, y se mantuvieron las actividades vía online.

Durante la nueva normalidad se estima un auge en el sector que labora a distancia como una de las primeras medidas en el sector para promover la producción. Probablemente exista una modificación en la ley laboral que permita este tipo de modalidad sin perjuicio para el empleado.

De nuevo, el uso de herramientas digitales, como Zoom, Skype o Hangouts para reuniones y videollamadas o los gestores de tiempo para empresas tomaron una importancia destacada que renovó la manera en la que se miran los empleos en real estate.

Las maquinarias de última tecnología permiten controlar remotamente las actividades. Con una sola persona en campo que redistribuya la información mediante estas herramientas comunicativas es posible mantener e incluso aumentar la productividad. Es posible que la nueva tendencia sea la de promover puestos de trabajo desde casa.

Desarrollos en pozo, ¿la solución?

Debido a la depresión económica causada por la detección de las actividades tras la cuarentena por el COVID-19 los especialistas indican que una inversión positiva para los meses venideros se encuentra en las propiedades en pozo y en pesos. La ventaja de las inversiones en pozo está ligada a la liquidez que ofrece, además de la posibilidad de “estancar” los préstamos en divisas. De esta manera, en el corto-mediano plazo las oportunidades de crecimiento se encontrarán en este tipo de inversiones.

Así lo han afirmado entidades en el ramo inmobiliario quienes confían en que los edificios en pozo serán una de las alternativas más sólidas en materia de inversión para la etapa posterior al COVID-19.

¿Es tiempo de comprar o de vender?

La incertidumbre ocupa los espacios de emprendimiento en este momento en el que la baja producción disminuye el valor de los activos. Muchos empresarios se preguntan por las posibilidades de comprar o vender. En época de crisis, las inmobiliarias consideran compleja la evaluación del mercado financiera. A pesar de la rebaja en el interés de la Reserva Federal, tanto la compra como la venta de inmuebles no está recomendada en este momento.

En casos en los que la necesidad por salir u obtener un inmueble habrá que considerar los préstamos concedidos así como la tasa de interés sobre la que se haya estipulado el préstamo y así visualizar una posible ganancia. La ventaja más clara en medio de esta situación es la extensión de préstamos o créditos, así como de hipotecas, que mantendrán su tendencia a distenderse. Aunque por supuesto que habrá excepciones a la regla, en especial para quienes consiguieron tasas de inversión muy bajas que se hayan revalorizado previa o posteriormente a la pandemia.