La 25° edición de ArteBA abrió sus puertas en la Rural

(CABA) El ministro de Cultura de la Nación, Pablo Avelluto, encabezó el corte de cintas que dio inicio formal a la 25 edición de la feria de arte contemporáneo arteBA, de la que participó junto al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, Juliana Awada, y el presidente de Fundación arteBA, Alec Oxenford.

“Esta feria tiene el propósito de generar un encuentro entre galeristas, artistas, coleccionistas, y tender redes aquí y hacia el exterior. Para muchos artistas ha sido muy importante pasar por aquí, y por eso estamos con una presencia institucional que busca desarrollar una plataforma para el arte del país, ya que uno de los problemas que tenemos en la Argentina es la concentración de la escena artística en Buenos Aires”, aseguró Avelluto.

Cada año, y durante cuatro días, arteBA se convierte en la cita ineludible del calendario artístico local que en esta edición, en la que celebra un cuarto de siglo, reunirá a 400 artistas y 85 galerías de catorce países, además de los 300 invitados internacionales y la presencia de 23 museos locales y extranjeros que llegan para comprar y acrecentar sus colecciones.

Pero además de desplegar a través de diversos formatos y soportes las más recientes tendencias del panorama artístico contemporáneo, arteBA hace un balance de estos 25 años, desde aquella primera edición que se realizó en 1991 con la presencia de un puñado de galerías y cerca de 20 mil asistentes, a este presente que suele convocar cien mil visitantes.

El Espacio Dixit se erige este año como una gran kermesse -y le gana en frescura al Barrio Joven- con una curaduría de Federico Baeza, Lara Marmor y Sebastián Vidal Mackinson, quienes presentan “Oasis”, una propuesta curatorial de 50 artistas a lo largo de 900 metros cuadrados que buscan tender un trazado sobre los últimos 25 años del arte argentino, en coincidencia con las celebraciones de la feria.

Allí se exhibe por ejemplo “Windows”, inmensa obra desplegable de Mariela Sacafati, una serie de afiches rojos sobre la pared con leyendas como “La melancolía no es siempre un mal sentimiento” o “Streaming permanente” que justamente hoy mismo adquirió el Malba para su acervo, a través de la donación de ICBC, así como un video mudo de Eduardo Costa.

También, la Asociación de Amigos del Museo Nacional de Bellas Artes, a través de su Programa de Adquisición de obras, duplicó los 20 mil dólares asignados en un principio y adquirió para la institución dos obras fundamentales del uruguayo Carmelo Arden Quin y una de Edgardo Giménez (“Mono albino”), una deuda pendiente con la colección, en palabras de su director, Andrés Duprat.

A la celebración del arte argentino se suma una fuerte presencia internacional que estará representada por 43 galerías extranjeras provenientes de Alemania, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, España, Estados Unidos, Francia, Italia, México, Países Bajos, Portugal y Uruguay; que junto a las 42 galerías argentinas, serán las protagonistas de esta edición.

Es un año de celebraciones en este 25 aniversario de la feria que se despliega a lo largo de los 18 mil metros cuadrados de los Pabellones verde y Azul de La Rural, que mira atrás sin nostalgia, aquella primera feria realizada en 1991 en el Centro Cultural Recoleta, con la presencia de un puñado de galerías, la asistencia de veinte mil visitantes y una ciudad de Buenos Aires donde la cantidad de espacios para exponer se contaban con los dedos de una mano.

Hay algunos inevitables, como el Barrio joven, con los espacios que están dando sus primeros pasos, o el espacio Photoboth, dedicado exclusivamente a la fotografía, donde este año presentan obra los creadores de e-flux, Julieta Aranda y Anton Vidokle, una dupla mexicana-rusa, creadora de la plataforma online más grande y poderosa en el mundo del arte.

Haciendo honor a su estirpe, la feria suele ser el espacio más “democrático” en el que acercarse a arte, sin curadurías, sin guiones: allí, una recorrida por sus pasillos permite apreciar obras como una pequeña témpera sobre papel de Xul Solar (“Grafía) de 1958 en la galería Rubbers, una pintura de perfectas líneas geométricas, “Sin título” de Roberto Aizenberg, de 1970 (en galería Van Riel), o un acrílico sobre tela calado de Fernanda Laguna, “Sin pensar”, de la galería Nora Fisch.

La feria dio su primer paso inicial informalmente anoche, con la primera adquisición a puertas cerradas de Chandon, que adquirió en el Barrio Joven “Batalla”, del joven artista tucumano Agustín González Goytía, una obra sobre tela de algodón con acrílico, tinta de birome, marcador al agua, pintura para tela y látex.

Uno de los imperdibles de la feria es la instalación –siempre ilusoria- del artista Leandro Erlich, en el ingreso al Barrio Joven Chandon, que presenta seis ascensores que no llevan a ninguna parte y en cuyos espejos no aparece el reflejo del que mira sino el de otro.

Otro destacado: la charla programada para mañana a las 15 en el stand del Ministerio de Cultura de la Nacion, dedicada a pensar la profesión, “El sueño es ahora” con la presencia de Cuauhtémoc Medina (MUAC, México), Gabriel Pérez-Barreiro (Fundación Cisneros, ex-Universidad Essex, USA), Idurre Alonso (Getty Institute, USA) y Andrés Duprat (MNBA, Argentina).

La feria arteBA estará abierta al público desde este jueves y hasta el domingo 22 de mayo de 14 a 21 en el Predio de La Rural, Sarmiento 2704. NR

Fuente: Diarioz