¿Cuántos sueldos cuesta irse de vacaciones?

Tras una caída de hasta un 15% en el poder adquisitivo es necesario re-ordenar las finanzas para no volver de las vacaciones con problemas en el bolsillo.

(CABA) La llegada del verano representa el inicio de las vacaciones para gran parte de los argentinos. Pero más allá de ser un momento de ocio, el descanso anual representa un gasto importante, con una combinación de ahorros, el sueldo y medio aguinaldo de fin de año, y el plus vacacional. Pero la pregunta de fondo a veces queda sin respuesta: ¿qué porcentaje de los ingresos anuales se deberían destinar a las vacaciones?

Especialistas consultados aseguraron que para no descuidar las finanzas personales, una persona debería destinar un 20% de todos los ingresos generados durante el último año. Esto equivale a 2,6 salarios para una persona en relación de dependencia, si se consideran los 13 sueldos con el medio aguinaldo de julio y de diciembre.

Como los precios subieron más que los sueldos en 2014, la caída del salario real se ubicará entre un 10 y 15 por ciento. Esto se hizo evidente en una baja en el consumo interno por primera vez en la última década, y las vacaciones no estarán exentas del ajuste en el bolsillo. “El que quiere repetir el destino o tener vacaciones similares, se da cuenta que no le alcanza“, resumió Nicolás Litvinoff, economista y director del sitio estudinero.

En diálogo con Infobae, subrayó que la planificación previa es esencial para emprender un viaje solo, en familia o con amigos, y hay que separar los gastos de traslado y alojamiento de los viáticos. También es importante definir el gasto diario promedio, que surge de dividir el total de viáticos por la cantidad de días de descanso. Esto permitirá que no se experimenten días de exceso ni de escasez.

¿Qué hacer con los pesos?

Mariano Otálora, especialista en finanzas personales, sostuvo que lo esencial es separar el deseo de la realidad. “Hay que saber cuánto querés gastar y cuánto podés gastar“, diferenció. En este sentido, recomendó armar un presupuesto no sólo para saber cuánto habrá que destinar para las vacaciones, sino también cuál será el medio de pago: efectivo, débito o tarjeta de crédito.

La administración de los pesos es fundamental, porque el país es el destino más elegido por los argentinos a la hora de vacacionar. “Como se paga en pesos, estoy en contra de pagar las vacaciones y financiarlas durante el año, porque tiene un efecto psicológico negativo“, especificó Litvinoff. Y si se paga con tarjeta, es importante asegurarse que ofrezcan cuotas sin interés.

Y en un año de caída del consumo y del salario real, las soluciones creativas salen a la luz para no resignar días de descanso. Compartir alojamiento con otra familia, viajar en temporada baja o elegir un destino más económico son algunas de las opciones que pisan con fuerza en esta temporada.

Por ejemplo, el alquiler de una carpa en el balneario Portofino en Mar del Plata cuesta $13.400 en enero, y baja a $10.550 en febrero. Y en el balneario Prius de Playa Grande, el alquiler mensual de una sombrilla pasa de $10.665 en enero a unos 8.080 en el segundo mes del año.

Para el director de estudinero, el alquiler de casaquinta es otra tendencia que crece, porque da la posibilidad de alargar el descanso en un lugar con pileta y parrilla. El barrio cerrado Santa Bárbara, en la zona norte del Gran Buenos Aires, ofrece alquileres que arrancan en $30.000 en enero. “Comer afuera puede salir un 100% más que una comida preparada en casa“, diferenció Otálora.

Cruzar la frontera

“El 55% de los argentinos que viajan al exterior van a Sudamérica“, aseguró Fabricio Di Giambattista, presidente de la Federación Argentina de Asociaciones de Empresas de Viajes y Turismo (FAEVyT). Brasil, Chile y Uruguay son los preferidos por la cercanía y la conectividad. “Después vienen Estados Unidos y Europa, con un turismo emisivo de entre un 10 y 15% cada uno“, continuó.

Para viajar fuera del país, Otálora aseguró que “no conviene pagar en efectivo” y sí financiarse con tarjetas de crédito y débito. “Viajar en el exterior cuesta un 80% más que hace dos años. Para una familia es prohibitivo“, dijo Otálora.

El descanso también se acorta para los argentinos por la cantidad de feriados. Con nueve fines de semana largo en 2014, se gastaron casi $11.000 millones, según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Con todo, el último fin de semana largo antes de las Fiestas marcó un gasto promedio diario de $440 por persona, dato que según la entidad registra un ajuste con respecto a 2013. “Con más cantidad de feriados, la gente no elige irse exclusivamente en temporada alta“, concluyó Otálora.